noviembre 07, 2010

6000 Km

6000 km no son nada para el tiempo que le toma a tu voz acelerar mi corazón.

6000 km es un número insignificante para la cantidad de veces que mis pensamientos se van hacia ti.

Vives bajo otra bandera, en otra tierra, bajo otro gobierno, tan lejos y tan cerca a la vez.

Y yo, a punto de renunciar a mi nacionalidad, a mi tierra, para sembrarme definitivo en tu mundo, pedir asilo en tu corazón, buscar mi hogar entre tus brazos.

Pensando seriamente en la posibilidad de compartir el cielo de tus ojos y despertar con el sol de tu sonrisa cada mañana.

Como loco buscando una voz que me hipnotice como la tuya, una mirada que me desnude, unos labios que me resuciten como solo tú sabes hacerlo.

Deseoso de probar el desierto de tu abdomen y de morir con cada roce de tu piel.

Y aquí, sin hogar, sin tierra, sin cielo, sin sol, sin tu calor, sin tu piel, he aprendido algo...

6000 km no eran nada cuando te decidiste a robarme el corazón.

Y 6000 km son solo un paso cuando tu corazón y el mío se deciden a latir al mismo ritmo y con la misma pasión.

No hay comentarios: