marzo 31, 2011

¿Cual es tu tipo?

Esta semana me lo han preguntado varias veces, y siempre respondo lo mismo: “Yo no tengo un tipo. No creo en los tipos.” Porque siempre hay excepciones a los tipos.

Yo prefiero pensar que hay ciertas características que me llaman la atención y que podría encontrarlas en cualquier tipo de persona.

Y si tuviera que indicar la más fuerte de esas características físicas diría, sin pensarlo mucho: “LA SONRISA”.

Sin lugar a dudas es la sonrisa lo primero que busco en una persona. Y no hablo de perfección dental, ni brillo cegador. Simplemente me llama la atención una persona que sonría bastante… y que sonría bonito.

Además que siento que eso es reflejo de una personalidad agradable, feliz, sociable, positiva (todas cualidades importantísimas para mi).

Y claro, a mis ojos, una persona que disfrute el sonreír naturalmente y con frecuencia es señal de sana autoestima y seguridad personal.

También existen esas personas que saben sonreír con la mirada, y tienen la capacidad de amoldar su sonrisa para indicar felicidad, juego, picardía, amabilidad, amor (y sabrán ellos cuantas más emociones o estados de ánimo podrán indicar solo con sonreír).

Entonces, creo que de ahora en adelante, si me preguntan cual es mi tipo, responderé: “Una bonita sonrisa, y todo lo que ella trae consigo, ese es mi tipo”.

marzo 29, 2011

Algo de cerveza

Acaba de terminar mi primera semana trabajando en el café. Bueno, si, estoy trabajando en un café/bar, y digamos que eso (entre otras ocupaciones) no me ha dejado mucho tiempo para mantenerlos actualizados.

Pero para no hacer esta entrada muy larga, me gustaría compartir con ustedes algunas cositas interesantes que he aprendido sobre cervezas (dado que cerveza es lo que más se consume en ese sitio).

1. Todo el mundo la prefiere fría, pero hay sus excepciones, algunos disfrutan más del sabor de una cerveza ligeramente fresca, no helada. Yo ni siquiera conocía la diferencia.

2. La expresión “empinar el codo” (que se refiere a “beber licor”) se aplica más a beber directo de la botella, algo que se conoce, en el caso de la cerveza, como beberla “parada”. Aunque también se puede “empinar el codo” bebiendo de una jarrita de cerveza, pero… no es lo mismo.

3. Un vaso de cerveza (y de gaseosa) se debe servir ligeramente inclinado, así se evita que la espuma ocupe más espacio que el liquido, y que se produzca un derrame.

4. Las cervezas se congelan, y al destaparlas pueden hacer erupción como las botellas de champaña, aunque no con la misma intensidad.

5. Una cerveza congelada (en extremo) puede estallar dentro de la nevera o en el momento de ser destapada. Y esto es ciertamente MUY PELIGROSO.

6. Es mentira que todas las botellas de cerveza traen lo mismo, ni siquiera aquellas que pertenecen a la misma compañia, a la misma marca y son del mismo estilo de envase. Algunas traen más, otras traen menos, no existe robot ni humano capaz de llenar todas esas botellas a la medida exacta.
 
7. Uno de los ingredientes de la cerveza es levadura, y como sabrán, la levadura esta viva, es un microorganismo, entonces, puede morir y descomponerse, arrastrando a la cerveza con ella y dándole mal sabor y color.

8. No hay nada mejor que beber cerveza directo de la botella, sentir el frio del hielo y el movimiento del líquido a medida que fluye hacia los labios.

9. Y si trabajas con cervezas bien frías toda la noche, lo más probable es que te provoque tomarte una.

Bueno, espero hayan disfrutado esta breve entrada sobre cervezas, ya hare todo lo posible por recuperar mi ritmo y seguir escribiendo y contándoles algunas cosas geniales. Por ahora los dejo, y me voy a buscar una bien fría.

Blessed be!